Decálogo para formar delincuentes

Queridos padres gilipollas:

Aquí os dejo con un magnífico decálogo para que el inútil de su hijo, malcriado por nadar en montones de pasta y de lujo, se forme un poco más como un delincuente. A pesar de que esta palabra les pueda sonar mal o de baja categoría, exintes delincuentes de alto standing, algunos mucho más gilipollas que los barrio bajeros, pues las necesidades son distintas. Así pues, me dirijo a ustedes para que sus hijos ricos del cagar puedan convertirse en futuros políticos corruptos, herederos de todas sus empresas, pertinencias y capitales, quizás un poco manchados de corrupción, y unos grandísimos hijos de puta para los contrarios a sus intereses:

1- Desde su más tierna infancia, dé a su hijo todo lo que le pida, consiéntalo. Así crecerá convencido de que el mundo le pertenece.

2- No se preocupe por su educación ética o moral. Espere a que alcance la mayoría de edad para que pueda decidir libremente sin una base establecida previamente. La hostia va a ser buena... Quizás se meta en el Opus Dei!

3- Cuando diga palabrotas, celébrelo con unas sonoras risotadas. Esto le animará a hacer cosas todavía más graciosas, como exterminar a más de 6 millones de judíos.

4- Nunca le regañe ni le diga que ha obrado mal. No le reprima, podría crearle un complejo de culpabilidad o podría descubrir que no es perfecto, como la sucia plebe.

5- Recoja todo lo que deje tirado por ahí y haga todo lo que le pida. Así se acostumbrará a cargar las responsabilidades sobre los demás.

6- Déjele ver y leer todo lo que caiga en sus manos. Esfuércese para que los platos, cubiertos y vasos que utiliza su hijo estén esterilizados, pero no se preocupe porque su mente se llene de mierda, puede que le den un Ondas por ello.

7- Riña a menudo con su cónyuge en presencia del niño. De esta forma, conseguirá que no le afecte demasiado una ruptura familiar, quizá provocada por su propia conducta.

8- Sea generoso. Que su hijo tenga siempre todo el dinero que pida. No vaya a sospechar que para conseguirlo es necesario esforzarse y trabajar.

9- Satisfaga todos sus deseos, apetitos y placeres. El sacrificio y la austeridad podrían producirle graves frustraciones. ¿Tiene ya un esclavo particular, su hijo?

10- Póngase de su parte en cualquier conflicto que tenga el chaval con sus profesores y con sus vecinos. Piense que todos ellos tienen prejuicios contra su hijo y que quieren fastidiarle, pues ser rico nunca fue fácil.

De echo, este decálogo (incompleto des de mi punto de vista, aunque levemente modificado por mí) podría aplicarse a cualquier tipo de ambiente familiar, pero los niós de papá merecen lamer mierda eternamente, así que mejor meterse con ellos que matar gatitos, ¿o no? Esta gente no merece ni la leche maternal... Ojala los violen un grupo de curas embriagados de fe y castidad, a partes iguales, mientras recuerdan el pasaje de: "Dejad que los niños se acerquen a mí y me coman el ra..." *.

Z for Zorglub

* Este fragmento ha sido censurado por el mismísimo Papa Ratzinger Z, así que, Al loro!