Este es un tema un poco delicao... a ver cómo lo explico... Al parecer, David Carradine, actor de Kung Fu y de Kill Bill, pues... esto... que se ha muerto, ¿no? Y se ve que estaba... ahí... dándole al... pequeño saltamontes y se murió. Bueno, no fue exactamente así...
El cuerpo de Carradine fue encontrado el pasado jueves en una habitación de hotel de Bangkok y, al parecer, tenía una cuerda atada al cuello y otra atada a su órgano sexual, su pequeño saltamontes, y ambas cuerdas estaban atadas a una especie de tendedero, según la policía. Dicen, los muy hábiles, que seguramente no fue un suicidio, sino que se estaba masturbando y algo se torció y la palmó (y ahora no hablo del pequeño saltamontes).
Anda que también, ¡qué putada! ¡Qué manera de irse! Con el tiempo la gente hablará de David Carradine como el actor de Kung Fu, el Bill de Kill Bill y ése que se murió pelándosela. A mí, personalmente, unos curas muy simpáticos que nos tocaban los huevos (y no sólo metafóricamente) me advirtieron que te podías quedar ciego, pero de ahí a palmarla... Seguramente si no hubiese sido afín a tan peligrosas perversiones sexuales aún ahora Carradine estaría terminando de filmar su última película allá en Bagkok. Es que tío, ¿no tenías suficiente con pelártela o meterte un dedo por el culo o darte latigazos con una toalla húmeda en los testículos o tirarte a una de esas prostitutas tailandesas de dudosa edad como hacemos la mayoría? Él no, tenía que atarse el cuello a la polla y tenderse cual pieza de ropa mojada. Pues así te has quedao, majo, tó tieso.
Sólo envidio una cosa de este tipo de muerte: morirse haciendo lo que más nos gusta, morirse en plena actividad sexual. ¿Y la cara de felicidad que se te queda que hasta en el funeral se lo toman de otra manera? Claro que sí, Carradine, dando ejemplo. Voy a lanzar un mensaje a todos los gilipollas que leáis y seáis leales a este pequeño espacio del ilimitado ciber-espacio: Masturbaros mucho, porque puede que tengáis la suerte de moriros así...
Z for Zorglub
Parece que no me he pasado mucho, ¿no?
El cuerpo de Carradine fue encontrado el pasado jueves en una habitación de hotel de Bangkok y, al parecer, tenía una cuerda atada al cuello y otra atada a su órgano sexual, su pequeño saltamontes, y ambas cuerdas estaban atadas a una especie de tendedero, según la policía. Dicen, los muy hábiles, que seguramente no fue un suicidio, sino que se estaba masturbando y algo se torció y la palmó (y ahora no hablo del pequeño saltamontes).
Anda que también, ¡qué putada! ¡Qué manera de irse! Con el tiempo la gente hablará de David Carradine como el actor de Kung Fu, el Bill de Kill Bill y ése que se murió pelándosela. A mí, personalmente, unos curas muy simpáticos que nos tocaban los huevos (y no sólo metafóricamente) me advirtieron que te podías quedar ciego, pero de ahí a palmarla... Seguramente si no hubiese sido afín a tan peligrosas perversiones sexuales aún ahora Carradine estaría terminando de filmar su última película allá en Bagkok. Es que tío, ¿no tenías suficiente con pelártela o meterte un dedo por el culo o darte latigazos con una toalla húmeda en los testículos o tirarte a una de esas prostitutas tailandesas de dudosa edad como hacemos la mayoría? Él no, tenía que atarse el cuello a la polla y tenderse cual pieza de ropa mojada. Pues así te has quedao, majo, tó tieso.
Sólo envidio una cosa de este tipo de muerte: morirse haciendo lo que más nos gusta, morirse en plena actividad sexual. ¿Y la cara de felicidad que se te queda que hasta en el funeral se lo toman de otra manera? Claro que sí, Carradine, dando ejemplo. Voy a lanzar un mensaje a todos los gilipollas que leáis y seáis leales a este pequeño espacio del ilimitado ciber-espacio: Masturbaros mucho, porque puede que tengáis la suerte de moriros así...
Z for Zorglub
Parece que no me he pasado mucho, ¿no?
1 comentari:
Hombre, un poco te has pasao, Zorglub... Pero como eres gilipollas, no te lo tendremos en cuenta.
Oriol
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